Ser eficiente es ser sostenible
Uno de los principales retos que enfrentan los hoteles es el consumo excesivo de energía. La implementación de sistemas de gestión energética, como sensores de movimiento, iluminación LED y paneles solares, permite reducir considerablemente el gasto energético. Estas tecnologías son un factor cada vez más valorado por los clientes.
La gestión del agua siempre es un recurso valioso
El agua es un recurso limitado, y su gestión eficiente se ha convertido en una prioridad para los hoteles. Las estrategias van desde la instalación de sistemas de reutilización de aguas grises, grifos de bajo consumo y el uso de tecnología para detectar fugas. Además, ya es habitual que los hoteles ofrezcan a sus huéspedes la opción de reutilizar toallas y sábanas para evitar el consumo innecesario de agua.
Eliminación de plásticos de un solo uso
Muchos hoteles están eliminando los plásticos de un solo uso en favor de materiales reciclables o biodegradables. Esto incluye desde la sustitución de las clásicas botellas de plástico por dispensadores de agua filtrada, hasta la eliminación de envoltorios plásticos en los kits de higiene. Este cambio responde a las expectativas del cliente moderno a la vez que reduce el impacto ambiental.
Alimentación sostenible, del plato a la conciencia
La alimentación es otro de los pilares de la sostenibilidad en la hostelería, y presenta muchísimas posibilidades para este sector a la hora de marcar una impronta de sostenibilidad en sus clientes. Muchos hoteles están apostando por la oferta de menús con productos de kilómetro cero, ecológicos y de temporada. Esta tendencia apoya a los productores cercanos a la vez reduce la huella de carbono asociada al transporte de alimentos. Además, la reducción del desperdicio alimentario se ha convertido en un objetivo prioritario mediante la donación de excedentes o la creación de menús más ajustados.
Las certificaciones verdes son un sello de confianza
Obtener certificaciones como la ISO 14001 o el sello LEED se ha vuelto un estándar para los hoteles que quieren mostrar su compromiso con el medio ambiente. Estas certificaciones no solo validan los esfuerzos de sostenibilidad, sino que también atraen a un público más consciente y exigente, que busca alojamientos comprometidos con el entorno. En Vitoria, el hotel Kora Green City – Aparthotel Passivhaus, destaca por su compromiso con la sostenibilidad, siendo uno de los apartahoteles más grandes del mundo en recibir la certificación Passivhaus. Este estándar garantiza un uso mínimo de energía, gracias a innovaciones como el suelo radiante-refrescante, paneles solares, y sistemas de ventilación que recuperan el calor y el frío.
Hotel sostenible en Vitoria, el Kora Green
En Berlín, el hotel Lulu Guldsmeden, ubicado en Potsdamer Straße, en el barrio de Mitte está certificado por Green Key, una reconocida etiqueta ecológica que evalúa criterios de sostenibilidad como el control de la huella de carbono y la gestión eficiente del uso de agua y energía. El diseño del Lulu Guldsmeden combina elementos nórdicos con materiales ecológicos, como muebles de madera de roble sostenible y ropa de cama orgánica.
Comunicación y concienciación al cliente
Un aspecto clave en la adopción de prácticas sostenibles es la comunicación transparente hacia los clientes. Informar a los huéspedes sobre las iniciativas del hotel y cómo pueden contribuir durante su estancia refuerza el compromiso con la sostenibilidad. Además, cada vez más viajeros buscan activamente alojamientos que promuevan estas prácticas, lo que hace esencial destacar estos esfuerzos en la web y otros canales de comunicación.
Beneficios económicos de la sostenibilidad
Aunque la implementación de medidas sostenibles puede suponer una inversión inicial, los beneficios a largo plazo son innegables. La reducción del consumo de recursos y la adopción de prácticas eficientes generan ahorros importantes. Además, la imagen de marca mejora, atrayendo a un segmento de clientes más amplio y fidelizado, que valora los esfuerzos medioambientales del establecimiento. La sostenibilidad ya no es una tendencia pasajera, sino una realidad que, afortunadamente, está transformando la industria hotelera. Adoptar prácticas responsables no solo tiene un beneficio para con el medio ambiente, sino que también mejora la experiencia del huésped y aumenta la rentabilidad del negocio. Los hoteles que apuesten por la sostenibilidad estarán mejor preparados para el futuro y para las exigencias de un cliente cada vez más comprometido.
